Sensación de pérdida del día

Hoy es uno de esos días en los que preguntarse para qué ha servido. Ha sido un día totalmente desaprovechado, nada emocionante, nada que contar, el aburrimiento ha sido el dueño.

Por la mañana dormir, ya que últimamente me he hecho muy amiga de las marmotas. Después del desayuno-comida he estado aquí bastante tiempo, de una página a otra, y hasta en algún momento nisiquiera miraba lo que tenía delante. Parecía un parásito del ordenador. Y por la tarde he ido a trabajar con toda mi buena intención, pero el buen tiempo y el título del taller poco claro para lo que se pretendía han hecho que no hubiese ni un solo niño. Así que he hecho un par de horas allí ayudando con unos carteles y murales. Y vuelta para casa. Sola y sin ganas de nada.

Odio estos días plof, siento que desperdicio el tiempo pero tampoco soy capaz de moverme y hacer algo interesante. En fin, el día ya se acaba así que en breve a dormir (por seguir una rutina).